el vendedor de sombras

Hace unos dias, en el mapa del mundo que tengo para ver quien se preocupa por mis sombras, apareció un puntito en Mexico. Pequeño pero un puntito. Es mi querida V. Asi, sin destacar mucho, como quien no quiere la cosa. Como es ella.
Ahora vive en una ciudad nueva, en un país nuevo. Un mundo nuevo. Y a veces, como es normal, se siente un poco sola.
Todos nos sentimos solos en alguna ocasión. Y no es necesario estar en un país nuevo, puede ser en tu propio barrio o tu propia ciudad. A mi me ha ocurrido en innumerables ocasiones, he llegado a pararme en medio de una avenida atestada de gente (por desgracia en demasiadas ocasiones lo he hecho) y preguntarme "que demonios hago aquí, si no me parezco en nada a los que me rodean?, si no tengo aqui a nadie a quien pueda decirle: salvame!".
No se si es esto lo que ella siente exactamente. No lo se. Pero se que la soledad puede invadirnos a pesar de tener mucha gente a nuestro lado.
Pero debemos aprender a vivir con ella, a quitarle beneficio, a decirle: "yo soy mas fuerte que tu". Por que en el fondo lo somos. Y debemos pensar que ese sentimiento de soledad es una forma de preguntarnos cosas, de conocernos a nosotros mismos, de aprender a vivir mejor y mas felices... o eso es lo que hago yo.

Por cierto, ahora cada día veo ese puntito en mi pantalla. Y se donde estas. Y te veo a ti. Y pienso en ti, y recuerdo 1001 conversaciones comunes, sonrisas, problemas compartidos...

Y estoy contigo. Aunque no me veas. Aunque solo eres un puntito. Pero eres mi puntito. Y este puntito mío no esta solo. De eso ya me encargo yo.